Inspectores del Área de Ambiente, dependientes de la Secretaría General y de Recursos Humanos, sorprendieron este miércoles 1 de octubre a los ocupantes de una camioneta Ford Ranger arrojando residuos en la zona del Camino de los Lecheros.
El procedimiento se dio en el marco de un control de rutina en distintos puntos de la ciudad, donde suelen registrarse microbasurales ilegales. Los agentes intervinieron de inmediato, identificaron a los infractores y labraron el acta correspondiente. Ahora, el Juzgado de Faltas aplicará la sanción prevista por ley, que puede llegar hasta los $2.440.000.
Este hecho se suma a otro ocurrido el pasado viernes 26 de septiembre, cuando personal de Ambiente detectó a una persona arrojando residuos en un terreno baldío de la zona de la Reserva Amanecer, mientras se realizaban tareas de limpieza.
“Estos controles de nuestros inspectores de Ambiente son permanentes, dentro del plan de trabajo de nuestra Secretaría, y continuarán realizándose para proteger nuestro medio ambiente de estas conductas desaprensivas e irresponsables”, expresó el Dr. José María González, a cargo de la Secretaría General y de RRHH.
Desde el municipio recordaron que está prohibido arrojar residuos sólidos en vías y espacios públicos, terrenos baldíos y dominios privados de utilidad pública municipal, de acuerdo con lo establecido en el artículo 127 del Código de Protección Ambiental (Ordenanza Municipal Nº 7942). Estas infracciones están penadas con fuertes multas económicas.
